El domingo 4 de junio se realizarán elecciones en el Estado de México y Coahuila y por tanto se implementará la Ley seca, una medida que tiene entre sus objetivos garantizar que la jornada se realice sin contratiempos debido a que se prohíbe la venta de alcohol. Conoce a detalle por qué se implementa esta ley y en qué localidades se hará efectiva.
En el Estado de México se elegirá a la próxima gobernadora, quien estará en el cargo por seis años y contiende Alejandra del Moral por la coalición PRI, PAN y PRD, mientras que Delfina Gómez representa a Morena, PT y PVEM.
En tanto, en Coahuila también se votara por gobernador, y quienes aspirarán al cargo son: Manolo Jiménez, candidato del PRI, PAN y PRD; Armando Guadiana que va por Morena; Ricardo Mejía Berdeja representante del Partido del PT; y Lenin Pérez, candidato del PVEM y de la Unión Democrática de Coahuila.
¿Qué es la Ley Seca y porqué se implementa en la jornada de elecciones?
La Ley Seca se implementó en México desde 1915 y expresamente prohíbe la venta de bebidas alcohólicas en acontecimientos importantes o algunas otras situaciones que el gobierno en curso considere relevante. El artículo 300 de la ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE) expresa que deberá implementarse antes y durante los comicios electorales.
¿En dónde y desde cuándo se aplicará la Ley Seca?
El Código Electoral de México establece que la ley seca estará vigente “el día de la elección y el precedente”, por lo tanto se hará efectiva a partir del sábado 3 de junio a las 00:00 y terminará el 4 de junio a media noche en los estados en donde se llevarán a cabo las jornadas, es decir en todos los municipios de Coahuila y del Estado de México.
Ley Seca: ¿Para quiénes aplica esta restricción y qué pasa si se quebranta?
La ley aplica para todos los establecimientos que se dediquen a la venta y distribución de bebidas alcohólicas: bares, tiendas, almacenamientos, supermercados y vinaterías, aunque la ley indica que se puede hacer una excepción si hay una “actividad complementaria a la venta de bebidas alcohólicas, como por ejemplo, restaurantes y otros establecimientos relacionados”.
Las sanciones cambian en cada entidad y pueden ir desde pasar unas horas en la cárcel, pagar multas económicas que podrían alcanzar hasta los $2,000 pesos, o la clausura definitiva de los establecimientos que sean sorprendidos vendiendo alcohol.