El destino es impredecible, al igual el lugar para nacer. Esta es la historia que te vamos a contar en donde un bebé decidió llegar al mundo en pleno vuelo a más de tres mil pies de altura. Sin duda algo increíble de contar.

Esto se dio a que Mendhi, una mujer originaria de Marruecos viajó a los Estados Unidos proveniente de Estambul, Turquía, faltando dos semanas para el nacimiento de su bebé, todo con la intención de que su hijo naciera en territorio norteamericano.

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Cuando las madres son primerizas, la fecha de parto no es totalmente exacta y esto fue lo que sucedió. Ya que en pleno vuelo la madre comenzó a quejarse, poniendo en alerta a la tripulación y a los pasajeros en pánico.

Afortunadamente estaba un médico.

Mendhi pensaba que eran dolores de estomago o una intoxicación por los alimentos que dieron en el avión, pero conforme pasaron los minutos, sucedió que se le rompiera la fuente a más de 30 mil pies de altura.

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Con esto la tripulación se puso a atender a la mujer y comenzaron a preguntar entre los pasajeros si de casualidad viajaba un médico, afortunadamente si se encontraba un doctor en el vuelo. Aunque de acuerdo a reportes este hombre dedicado a la medicina llevaba más de 40 años de no entrar en labores de parto, pero que iba a necesitar toda la ayuda posible.

Afortunadamente la historia terminó con un final feliz para la tripulación de Turkish Airlanes, ya que Mehdi dio luz a un niño, al momento de aterrizar en Chicago fueron llevados al hospital para ser revisados.

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Así que con esto se demuestra que no se selecciona en donde nacer.

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