
¿Te imaginas trabajar como botones en un hotel de lujo y que por tu buen trato uno de los huéspedes te dejara una propina millonaria? Pues esto le ocurrió a Taskin Dastan, un hombre que trabaja como botones desde 1990 en el Hotel Korur De Lux, ubicado en la ciudad de Aydin (Turquía).
Te contamos la historia:
Resulta que Charles George Courtney era un adinerado huésped británico que desde 1997 acudía mínimo una vez al año al lujoso hotel, de hecho, solía hospedarse en la misma habitación (401), por lo que el lugar la bautizó como "la habitación de Charles".
El hombre inglés era muy popular y apreciado por los empleados, pero fue justamente con Taskin con quien logró entablar una amistad mucho más cercana y esque el botones era muy amable cuando interactuaba con los huéspedes y su filosofía era tratarlos como familia y no como turistas.

Aunque la vida parecía transcurrir con normalidad, en 2014 Charles enfermó y Dastan y otros miembros del hotel lo fueron a visitar al hospital para darle ánimos. Lamentablemente Courtney murió a principios del 2021.
Luego de la muerte del huésped, Taskin fue notificado a través de una llamada hecha por el Consulado del Reino Unido sobre la herencia que le había dejado su amigo, en el testamento también fueron incluidos otros trabajadores del Korur De Lux.
Al enterarse de la gran noticia, el hombre turco comentó que que cuando fue a visitarlo al hospital, el inglés le hizo el comentario de que quería dejarle algo para la educación de sus hijos, pero creyó que no hablaba en serio.
Aunque se desconoce el monto que le dejó Charles a Taskin, medios turcos aseguran que el botones ya no tendría necesidad de trabajar, pero parece que el hombre no opina lo mismo, pues asegura que ama su trabajo y hasta el momento sigue formando parte de la plantilla de empleados del hotel de lujo.