
En San Luis Potosí el sacerdote Pedro Hernández, fue detenido por autoridades indígenas de la comunidad de Texquitote, municipio de Matlapa por presuntas faltas a la moral, luego de haber sido sorprendido a altas horas de la noche en compañía de una mujer.
Mientras que la diócesis de Ciudad Valles informó a través de un comunicado que el sacerdote fue retirado temporalmente del ejercicio de su ministerio, esto luego de que a mediados del mes de julio fue reportado como desaparecido.
En el comunicado se especifica que el cura se encuentra en un periodo de reflexión y discernimiento, además mencionan unas disculpas a los feligreses que pudieron sentirse ofendidos por el comportamiento del párroco, recalcando que los sacerdotes católicos tienen el compromiso de ser siempre un buen ejemplo para sus comunidades.
El vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera, pidió no juzgarse o entrar en debate de nueva cuenta el tema del celibato que se les pide a los sacerdotes, quienes en su gran mayoría cumplen con ese compromiso en favor de su ministerio.
Finalmente, solicitó no "linchar" al sacerdote, puesto que es un ser humano y como tal tenemos errores, no es un acto como para meterlo a la cárcel ni mucho menos excomulgarlo, pero si es una falta grave a su ministerio, por lo que en su consciencia tendrá que definir si desea arrepentirse, pedir perdón y regresar al sacerdocio o en definitiva vivir una vida como laico, con la oportunidad de trabajar en otra cosa, tener una pareja e incluso tener familia.