
En los 90, Selena Quintanilla tocó el éxito con su voz, acompañada de su grupo Los Dinos recorrió mundo y se presentaba en los mejores lugares. La reina del Tex-Mex fue invitada al programa estelar nocturno de Televisa, conducido por Verónica Castro y lo que sucedió en esa entrevista parecía surreal.
La joven mexico-americana alcanzó gran éxito y la conductora era el rostro de los programas estelares de Televisa, como "La Movida" que en esa ocasión hizo algunos programas especiales fuera del estudio de Televisa en Ciudad de México y viajaron con la producción hasta Monterrey para grabar algunos programas.
En esa oportunidad, fue la primera vez que Selena y Verónica se encontraron. Aquella noche, la joven estrella abrió su corazón y le contó a la ojiverde detalles de su carrera, de su familia y también le enseñó a la actriz sus otros talentos.
La intérprete de "No me queda más" presumió que era muy buena diseñadora y como muestra le hizo varios regalos hechos por sus propias manos: Aretes, un sombrero y un cinturón fueron algunos de los presentes que le entregó a la mexicana delante de las cámaras y la sorpresa fue mayúscula para la conductora, quien además de admirar su forma de cantar se quedó con uno de los más gratos recuerdos de vida.